Al día siguiente de haber asumido como técnico interino de Bolívar, Vladimir Soria probó este martes un equipo con variantes en la zona ofensiva y puso un “dibujo” 4-3-3 para enfrentar el jueves (18.15 de Bolivia) a Arsenal de Sarandí en Buenos Aires, por la sexta y última jornada de la fase de grupos de la Copa Sudamericana.
El exfutbolista y subcampeón de la Sudamericana como DT en 2004, puso en ofensiva a César Menacho, Leonardo Ramos y Bruno Miranda.
En la práctica, que tuvo lugar en el estadio Libertador Simón Bolívar, poco antes del viaje de la delegación a Buenos Aires, el DT puso un tridente que no jugó antes junto.
Con el anterior técnico, el español Natxo González, Menacho y Miranda ingresaban en el segundo tiempo. En todo caso, ahora Bolívar tiene la necesidad de ganar sí o sí y, por ello, al parecer Soria se la piensa jugar en ofensiva.
La Academia tiene una escasa posibilidad de ganar el grupo y pasar a octavos de la Sudamericana. Para ello debería ganar a Arsenal con una buena diferencia de goles y esperar que, en Cochabamba, Wilstermann le dé una mano y supere al brasileño Ceará.
Esquema
Con Soria, Bolívar alienta sus posibilidades ofensivas con más hombres.
La alineación que probó el DT es la siguiente: Rubén Cordano, en el arco; Diego Bejarano, Alberto Guitián, Jairo Quinteros y Juan José Orellana o Roberto Carlos Fernández, en la defensa; Erwin Saavedra, Leonel Justiniano y Álex Granell, en el mediocampo; Menacho, Ramos y Miranda, en el ataque.
En los cerca de 40 minutos de fútbol que hizo el plantel, Orellana siempre estuvo en el equipo principal, mientras que Fernández fue colocado con los suplentes; sin embargo, es una duda que Soria tiene por resolver hasta el día del partido.
Viaje
Al término del entrenamiento el plantel almorzó en el mismo escenario de Tembladerani, de donde se dirigió al aeropuerto de El Alto para tomar el vuelo de las 15.00.
En Buenos Aires, la delegación estará hospedada en el Hotel Hilton.
El miércoles por la mañana (10.00 de Bolivia) está programada su última práctica en el complejo Casa Amarilla de Boca Juniors.
El retorno a Bolivia está programado ni bien termine el compromiso internacional. La comitiva llegará a La Paz en la madrugada del viernes.
Los jugadores que radican en el exterior se irán directo a sus países, al abrirse un receso de al menos dos semanas debido a la disputa de la Copa América.