Independiente Petrolero, que esta temporada regresa a la División Profesional del fútbol boliviano, tiene un objetivo deportivo importante: ser uno de los ocho primeros de la tabla de posiciones que logre la clasificación a una copa internacional de 2022.
Con esa meta, el subcampeón de la Copa Simón Bolívar 2020 ya ha concretado la incorporación de 8 refuerzos, entre nacionales extranjeros.
Los últimos en ser anunciados fueron el delantero argentino Martín Prost (foto), quien llega del Gimnasia Esgrima de Jujuy (entre 2018 y 2019 integró la plantilla de Sport Boys de Warnes, en Bolivia); el mediocampista Marcelo Gomes y el defensor Brian Hinojosa, quienes actuaron en San José y Real Potosí, respectivamente, en la temporada 2020.
En el inicio de la semana anunció los fichajes del arquero Alex Arancibia, además de Enrique Díaz, Francisco Silva, Gustavo Cristaldo y Gonzalo Moruco.
Piensa en grande
Su idea no se reduce a eludir el descenso, sino que pretende estar de mitad de tabla para arriba.
La presidenta del club, Jenny Montaño, manifestó que se está trabajando para ello en conformar un buen plantel, que “pueda estar entre los ocho mejores de Bolivia, esa es nuestra meta”.
Independiente, que ratificó al exgolero Marcelo Robledo como su director técnico, también está renovando con varios jugadores que integraron el plantel que obtuvo el ascenso.
“Sabemos que la hinchada a va pedir jugadores muy caros, pero nosotros vamos a manejarnos en la medida de lo que podamos cumplir, que es lo más importante”, apuntó.